Rincones Cotidianos

miércoles, mayo 21, 2008

Esencia

Soy un tipo sencillo que tiene claro que quiere de la vida, pero extrañamente siempre selecciono los caminos más complicados para lograrlo.
Ella es alguien que me llega al corazón, que sin duda se ha ganado todo lo que yo siento por ella.
Pero hoy no me atrevo a mirarla a los ojos porque me aterra lo que veo, me aterra saber que es la misma persona que yo conocí, la misma que conozco, pero que ya no la reconozco, es como un fantasma, su imagen está ahí, pero ha perdido su calor, ha perdido su alma y yo la aprecio, la quiero, la estimo y le debo muchos cariños y cortesías, pero cuando miro al espejo me doy cuenta que no está ahí.
Y se siente tan mal, deja un sabor de boca horrible que alguien que te ha dado tantas cosas dulces en tan corto tiempo sepa a lo que me saben las cosas con ella hoy, que no es amargo, es que no me saben a nada, ese insípido tormento es algo que me desconcierta.
Yo nací para odiar o amar profundamente por lo cual la indiferencia es el peor de los castigos que me pueden infringir.
Me hace falta sentir que me gusta, no es que me haga falta que me corresponda, solo que parte de ella para mí era eso, alguien que me gustaba a quien yo quería de una forma diferente y ahora no es la misma, ahora que no me gusta la noto tan vacía y es muy difícil cuando uno quiere tanto a alguien y deja de sentir su esencia.

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